Por Diego Alejandro Gallegos Rojas
Según dijeron los vecinos, la madre había muerto envenenada, dejando a cinco pequeños huérfanos. Sentimos pena por ellos. Ningún familiar se hizo cargo, peor su padre que nunca supimos quién era. Los pequeños lloraban por afecto, tenían frío y hambre. Entonces, mi hermana se ofreció a criarlos. Con mis propios ojos vi como Nirta daba de amamantar de sus pechos a los cinco cachorros de la perrita Kaila.
Diego Alejandro Gallegos Rojas (Loja-Ecuador). Ensayista y escritor. Máster en Derechos Fundamentales, Universidad Carlos III Madrid, España. Especialista Superior en Derechos Humanos Instructor de Desarrollo Humano, Mozambique, África. Observador Internacional de Derechos Humanos como Acompañante Ecuménico en Palestina e Israel. Como escritor ha publicado el libro de cuentos La orgía de los gusanos (2017).

Foto portada tomada de: https://bit.ly/3yAjyCu