Por Jorge Dávila Vázquez
(Colaboración especial para Máquina Combinatoria)
A Sebastián Díaz, para que lo lea alguna vez.
Para Sebastián, el terrible dolor por la muerte de su abuela hubiese podido tener una solución bien simple. Un día, le dijo a su madre que todo era cuestión de una competencia: palomas y abuelitas volarían hacia el cielo y las que ganasen se quedarían allá.
“Yo les hubiera dicho en el oído a las palomas que ellas tenían que ganar, añadió, con una mirada en que la ingenuidad de sus cinco años brillaba como un astro; y así las abuelitas hubieran vuelto a la tierra.”
Y el corazón de Dios, en el que la vida y la muerte, el amor y el dolor, las sonrisas y el llanto se funden en una sola llama sempiterna, sintió un leve estremecimiento.
Jorge Dávila Vázquez (Cuenca,1947). Doctor en Filología por la Universidad de Cuenca, docente, escritor y crítico de arte. Ha publicado libros de cuento, novela, poesía, teatro y ensayo, y ha recibido importantes reconocimientos, como el Premio Nacional Aurelio Espinosa Pólit y el Premio Joaquín Gallegos Lara. La obra de Jorge Dávila consta en antologías nacionales y extranjeras, con textos traducidos al francés, inglés, alemán, portugués, italiano y hebreo. Ha colaborado con revistas y diarios nacionales y extranjeros. (Fuente: Lo que leo: https://www.loqueleo.com/ec/autores/jorge-davila-vazquez)

Foto portada tomada de: https://bit.ly/3pwuWut