David Andrés Duque
(Colaboración especial para Máquina Combinatoria)
Yace en el asfalto la poesía dedicada a nuestro infinito,
letras sudan su tinta para borrarse,
no soportan, no han entendido,
como lo escrito se hizo indefenso a que fracase.
Mujer solo a usted me recordase,
el astro nocturno plasmado su rostro,
no carece de detalles,
dudo el retorno,
de la cristalina y frágil luna que evade al abrazarle…
Pernoctar acompañando los faros,
entrevistan motivos,
por la sonrisa caída y rasgos preocupados,
me han de ser ostentados por su falta de prestigio.
Una ilusión,
sin aspiración de invocar,
y ahora la estima en inclinación,
con desidia de conservar.
Esperanzado en la agonía,
más que la intuición de sus reclamos,
plácido de ya no presumir si es usted mía,
Porque dígame ¿quién muestra eufórico lo que lo está matando?
Foto portada: https://pixabay.com/photos/man-face-look-people-sad-emotion-164217/
Revista Máquina combinatoria 